Para sacar todo el partido a las tarifas planas de acceso a internet desde un dispositivo móvil, principalmente un teléfono, nada mejor que compartirlas con otros dispositivos como tabletas, ordenadores portátiles o cualquier dispositivo con Wi-Fi. Este tipo de conexión se conoce en inglés como tethering.
Antes de sumergirnos en los detalles de configuración de esta conexión compartida, cosa que abordaré en futuros artículos, me gustaría comentar lo siguiente:
- Si bien podemos compartir la conexión con más de un dispositivo, si nos excedemos con el número el ancho de banda disponible para repartir con cada dispositivo puede ser muy pequeño y la velocidad de conexión muy lenta.
- Es conveniente verificar en el contrato que tipo de tarifa plana de conexión a internet tenemos. Lo principal es determinar si hay algún tipo de límite al número de Gb a transmitir por mes y si nuestro operador nos cargará un importe adicional al superarlo, si la velocidad simplemente se reducirá o si nos quedaremos sin conexión. Además hay que asegurarse de que el operador no prohíba el tethering.
- Aunque el operador de telefonía normalmente nos avisará cuando estemos cerca del límite de datos de la tarifa, conviene utilizar alguna aplicación especializada como Onavo Count que realice un seguimiento más detallado del nivel de usó de la conexión celular.
- Finalmente, comentar que la compartición se puede realizar por Bluetooth o un cable USB, lo que limita la conexión a un solo dispositivo adicional, o por Wi-Fi, que amplia el número de dispositivos que se pueden conectar simultáneamente.
En próximas entradas revisaremos que hace falta para compartir la conexión a internet desde iPhone, Android o Windows Phone.